La adjudicación de la «autopista del colesterol» fue ilegal

La Comisión Europea ha interpuesto un recurso contra España ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas por las ilegalidades cometidas en la adjudicación de las autopistas de Segovia y Ávila y la prórroga de la AP-6.
 
En 1999, la empresa Abertis (que entonces se llamaba Iberpistas) recibió del Gobierno de José María Aznar la concesión de explotación de dichas vías.
 
Años después de terminadas las obras de ampliación de la autopista A-6 nos enteramos del chachullo de su concesión
 
El Ministerio de Fomento adjudicó una concesión administrativa para la construcción, conservación y explotación de los tramos de autopista de peaje A-6, conexión con Segovia y autopista de peaje A-6, conexión con Ávila. Además de la conservación y explotación a partir de 2018 de la autopista de peaje A-6, en su tramo Villalba-Adanero.
 
Con motivo de la adjudicación de dicha concesión se ofrecieron otras muchas obras que no habían sido anunciadas, principalmente la construcción de un nuevo carril entre las localidades de San Rafael (Segovia) y Guadarrama (Madrid) -que ha incluido un nuevo tercer túnel bajo la Sierra de Guadarrama-, un gran área de peaje en San Rafael, un cuarto carril entre Las Rozas y Collado Villalba, y un tercer carril entre Villalba y Guadarrama.
 
El valor de esta operación fue superior al valor total de las obras publicadas. Es decir, estos proyectos se realizaron sin previa publicación de los mismos, como es debido.
 
La Sierra de Guadarrama ha sufrido en su corazón una herida en forma de ampliación de la «autopista del colesterol» (como se conoce la vía que une Madrid con Segovia), que tiene como fin vender viviendas en su entorno
 
«Para evitar posibles sanciones y los perjuicios a la ciudadanía, el actual Gobierno del PSOE debe aceptar la posición de la Comisión allanándose a su demanda, para lo que es imperativo revocar la concesión otorgada fraudulentamente a Abertis. Es decir, volver al punto cero de la adjudicación y aprovechar para reconvertir estas autopistas en autovías, donde la gratuidad está garantizada», ha añadido Carlos Bravo, portavoz de Centaurea, organización ecologista segoviana que junto con el sindicato CC.OO. de Ávila denunció el caso.
 La Sierra de Guadarrama recibe agresiones mientras, de manera paradójica, continúa la tramitación de su declaración de Parque Nacional, máxima figura de protección en España

Noruega prohíbe la utilización del mercurio, también su uso dental

Las reacciones ante los peligros del mercurio se suceden. Si, como comentábamos en este blog, ciudadanos españoles de varias asociaciones de afectados por el mercurio van a presentar una denuncia en los juzgados en próximos días, hoy nos enteramos de que Noruega también ha prohibido el mercurio dental.
Muchos utensilios cotidianos como el termómetro contienen mercurio. Noruega no permitirá que se fabriquen con este elemento químico
 
El mercurio es un elemento químico que cuando aumenta su temperatura produce vapores tóxicos y corrosivos. Es dañino por inhalación, ingestión y contacto. Es un producto muy irritante para la piel, los ojos y las vías respiratorias.
 
El Gobierno noruego ha anunciado que a partir del 1 de enero de 2008, prohíbe en su totalidad la fabricación de objetos que contengan mercurio así como su importanción y exportación.
El ministro de Medio Ambiente de dicho país ha explicado que el mercurio es uno de los agentes contaminantes más peligrosos y que existen alternativas no dañinas a su utilización.

El mercurio no es biodegradable por lo que es muy contaminante
 
La denominada Petición de Luxemburgo persigue la prohibición internacional del mercurio en los empastes dentales de amalgama, ya contemplada por el Gobierno noruego. La asociación española Mercuriados ofrece más información al respecto y recoge firmas para apoyar dicha Petición.

El costo del bienestar, químico

Cuando hace ya tres años rodamos el documental Carga tóxica,(Documentos TV, La2 de Televisión Española) descubrimos, al menos yo, un nuevo mundo de enfermedades medioambientales. Graves dolencias que incapacitan cada año a miles de personas, que las marcan de por vida; provocadas por las sustancias químicas tóxicas que existen en nuestro medio natural -o no tan natural, claro-.Como explica el presentador de dicho video, significa, al menos en parte, «el costo del bienestar», químico en este caso.
Existen 104.000 sustancias químicas liberadas en el medio ambiente y muchas de ellas está comprobado que son muy nocivas para nuestra salud
 
Me refiero a las ahora bastante conocidas fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica y, sobre todo, al Síndrome Químico Múltiple (SQM). Hicimos decenas de entrevistas personales para dicho trabajo documental y las personas afectadas por los contaminantes ambientales se quejaban de los mismos males.
 
Hoy se están publicando cientos de trabajos científicos sobre ellos y muchos médicos ya los diagnostican con cierta precisión, pero todavía las personas que los sufren están condenadas. No sólo a padecer las múltiples dolencias que acarrean estas enfermedades -provocadas además por varias causas al mismo tiempo- sino también al ostracismo.
 
En gran parte por la propia Administración, a la que no le conviene reconocer la existencia de estas personas, que enferman por el simple hecho de vivir en una sociedad que ha sacrificado todo al «progreso tecnológico» y a un bienestar antinatural.
 
De reconocerlas, además de gastar millones de euros en las ayudas que merecen, se estaría deslegitimando el propio modelo económico en el que es tan importante el sector químico -químico tóxico, diría yo-.
 
Tuvimos oportunidad de sufrir ese poder en nuestras propias carnes tras el rodaje de Carga tóxica, que tuvo que rehacerse varias veces por las presiones de ciertas compañías químico-tóxicas para que hiciéramos una versión light del documental. Pero eso ya lo contaremos en próximas ediciones de este blog, estad atentos.
El propio modelo económico está impulsado por el sector químico-tóxico y cada vez son más patentes los impactos que genera en la salud y la ecología
 
Un ejemplo de todo esto es la página que el Ministerio de Trabajo español dedica en su web a la Sensibilidad Química Múltiple. Como los propios afectados comentan: «está llena de ‘sospechas’ hacia la SQM, cuando no directamente la niega». Cuestiona la enfermedad desde el principio del texto, por ejemplo entrecomillando la palabra «enfermedad», referida a este síndrome, u obviando las conclusiones del Congreso de Medicina Ambiental de Brunete (Madrid), celebrado en junio de 2007, en el que quedó patente la dimensión del problema.
 
Esta página del Ministerio relaciona de manera algo confusa la SQM con un «trastorno psiquiátrico». Sin querer hacer diagnóstico, que no es mi terreno pues yo soy periodista (no médico), lo cierto es que buena parte de los doctores, quizá por desconocimiento del tema, diagnostican a estas personas enfermedades mentales donde las hay ambientales (generando con ello incluso mayores problemas a los pacientes al tratarlos con peligrosos medicamentos que pueden agravar sus dolencias).
 
Esta es una de las constantes quejas de los afectados por estos trastornos (protesta que sí refleja el autor de la página, Jordi Obiols Quinto, licenciado en Biología y Farmacia). Una afectada de Madrid, María José, comenta al respecto: «Parece increíble que su autor sea el mismo que, en sus textos fuera de la web del Ministerio (e incluso dentro de otras páginas de este) no cuestione la SQM en ningún momento, dándole la justa categoría de enfermedad, y en concreto, de enfermedad laboral».
 
Esta persona aporta dos ejemplos: NTP 595: Plaguicidas: riesgos en las aplicaciones en interior de locales (pinchar el enlace y buscar en el texto la palabra «sensibilidad química múltiple»), y Más malos que la peste: plaguicidas de uso ambiental, un riesgo grave y poco conocido (pinchar el enlace. En él se habla específicamente de la SQM en el punto 1.8 como Síndrome de Hipersensibilidad Química. El documento forma parte de la revista «Mujeres y Salud» nº7).

Muchos productos que se utilizan de manera cotidiana en el hogar pueden hacer la vida imposible a los habitantes del mismo

A día de hoy, los afectados por SQM continúan sin existencia «oficial» y por tanto sin derecho a ningún tipo de ayuda ni reconocimiento. De algún modo, no conviene reconocerlos pues costarían mucho dinero. «Todo esto sí que conlleva para nosotros un cuadro psiquiátrico de depresión como reacción a la muerte social a la que nos vemos relegados, sobretodo por este tipo de des-información oficial a médicos, evaluadores del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o asistencia social».

Navidades sin médicos en venta

Estas ya no podrán ser unas navidades sin médicos en venta pero las próximas quizás sí. En enero va a presentarse una nueva asociación de profesionales sanitarios que quieren incidir y cambiar las relaciones entre la industria farmacéutica, la Administración pública y los de su gremio. Están hartos de ver cómo se degrada su oficio día tras día a mayor gloria de los intereses de los laboratorios y de los profesionales de la salud corruptos.
 
La plataforma, cuyo nombre desvelaré un poco antes de su presentación -pero que ya adelanto que no son nada «agradecidos»-, parte de la asociación de más de 80 médicos, enfermeras y farmacéuticos. Irá en una línea similar al trabajo que realiza el movimiento internacional Nofreelunch y sus filiales, como la italiana No Gracie, Pago Io.
 
En España hay laboratorios que compran a los médicos con dinero para que receten sus productos
 
El principal problema, que no el único que encuentran estos profesionales, es que los laboratorios farmacéuticos han generado una «cultura de patrocinio» en torno a toda la cadena que conforma la comercialización de fármacos. Esto afecta a la autonomía de los profesionales sanitarios y la racionalización -o mejor dicho a la falta de la misma- a la hora de prescribir fármacos.
 
No sólo estamos hablando de que los visitadores médicos de las compañías farmacéuticas corrompen a los médicos con los regalos que les ofrecen a cambio de que receten sus productos, práctica ilegal, por cierto. Es que en España hoy se está comprando médicos directamente con dinero a cambio de recetas que demuestren que los galenos le han dado salida a los medicamentos del laboratorio sobornante. Esto, pese a las dificultades que conlleva poder probar dichos sucesos, conseguí publicarlo este año 2007 que termina, en la revista Discovery DSALUD.

La presión de los laboratorios ha abocado a la mayor crisis ética de la historia de la sanidad
 
La nueva plataforma contra la corrupción sanitaria y por la ética que está promoviéndose es una gran noticia para todo el ámbito de la salud y sobre todo para los ciudadanos. Y es que el año 2008 va camino de ser el de la publicación de códigos deontológicos, tan necesarios si se cumplen. Porque los hay que sólo sirven para figurar: está claro que el código deontológico de Farmaindustria -la patronal de los laboratorios farmacéuticos en España- que pretende velar porque no se soborne a los médicos se está incumpliendo.
 
Digo lo de los códigos deontológicos porque hace unas semanas la farmacéutica Roche publicó su código de relación con las asociaciones de pacientes. Viene esto a cuento del escándalo que supone que muchas de estas instituciones estén financiadas en todo o en parte por los laboratorios.
 
EFPIA, la patronal europea de farmacéuticas, también prepara un documento similar. Espero que lo utilicen más que el que tiene Farmaindustria sobre buenas prácticas en la promoción de medicamentos, ya citado.

La estrategia de promoción entre los médicos de ciertos laboratorios farmacéuticos es clara: dinero a cambio de recetas

Hoy mismo me he enterado que una institución pública como la Agencia de Evaluación de Tecnología e Investigación Médicas de Cataluña acaba de hacer público su Código de buenas prácticas científicas en la relación con la industria sanitaria. Urge profundizar sobre los conflictos de interés que rodean al sistema sanitario porque la salud de las personas no puede ser una mercancía.

Más evidencias sobre el peligro de la radiación de los móviles

Diversas organizaciones de afectados por la contaminación electromagnética que despiden cables de alta tensión, antenas de telefonía y los propios teléfonos, estudian cómo «presentar en sociedad» el último informe que cuestiona los efectos para la salud de esta tecnología.
 
Hace unos meses se conoció un nuevo trabajo científico que eleva la preocupación sobre los efectos de los campos electromagnéticos de muy baja frecuencia en la salud humana. El estudio llama la atención sobre la necesidad de disponer de estándares más estrictos de seguridad de la telefonía móvil, las líneas eléctricas y otras fuentes de exposición en la vida diaria.
 
Los científicos responsables del trabajo piden que se apliquen criterios mucho más restrictivos de seguridad pública para reducir la contaminación electromagnética
 
El informe se conoce como «Bioiniciativa (Bioinitiative Report): Un fundamento sobre los estándares de exposición pública a los campos electromagnéticos basándose en la biología». Lo ha realizado un grupo de trabajo, Bioiniciativa, que reúne a científicos, investigadores y profesionales de las políticas de salud pública internacionales. En total, 20 expertos más doce críticos externos al trabajo.
 
La Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) ha aportado a este informe un capítulo basado en un estudio de la propia institución: «Últimas lecciones de las primeras alertas: el principio de precaución 1896-2000».
 
Una de las principales conclusiones del Bioinitiative Report es que los estándares públicos de seguridad existentes, que limitan los niveles de radiación en casi todos los países del mundo, deben ser miles de veces más bajos.
 
Los actuales estándares de seguridad están obsoletos, urge reducir los niveles de exposición a los campos electromagnéticos
 
El informe ofrece detallada información científica sobre los impactos en la salud cuando los ciudadanos están expuestos a la radiación electromagnética cientos y miles de veces por debajo de los límites establecidos por instituciones como la ICNIRP (International Commission on Non-Ionizing Radiation Protection, Comisión Internacional de Protección contra la Radiación No Ionizante).
 
Esta agencia, dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), mantiene estrechas relaciones con las compañías del sector eléctrico y de las telecomunicaciones, como desde hace años vienen denunciando los científicos críticos. En todo ello también profundiza nuestro libro Conspiraciones tóxicas.
 
Los autores de este nuevo estudio han revisado más de 200 análisis publicados sobre este tema.
Un móvil roto, paradoja de la pérdida de salud que podemos experimentar por su utilización
 
El experto de salud pública y coeditor del informe, el doctor David Carpenter, Director del Instituto de Salud y Medio ambiente de la Universidad de Albany, Nueva York, indica: «la exposición a largo plazo a alguna clase de campos electromagnéticos puede causar efectos graves en la salud». Añade que es necesaria una buena planificación de la salud pública para impedir cáncer y enfermedades neurológicas en la ciudadanía.
 
En próximos días desgranaremos qué situaciones de riesgo concretas para nuestra salud explica este informe. Un resumen en castellano del Bioinitiative Report puede consultarse aquí.

Prozac para los niños

Con motivo de que la Agencia Europea del Medicamento (EMEA, por sus siglas en inglés) ha dado su visto bueno a la administración de Prozac a menores de 18 años, se ha constituído la Plataforma Internacional Contra la Medicalización de la Infancia. Con la venta de este producto farmacológico a menores, el laboratorio farmacéutico Lilly trata de encontrar nuevos mercados entre los niños y adolescentes.
 
Muchos profesionales sanitarios están tratando de que la Comisión Europea reconsidere su apoyo al consumo de psicofármacos por los niños
 
La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo mantiene abierto el expediente 761/2006 con las peticiones de la citada Plataforma de anular la autorización para la administración de fluoxetina (principio activo de Prozac) en la infancia.
 
Esta organización pide también que se investigue la validez de todas las autorizaciones de medicamentos concedidas por la Agencia Europea del Medicamento, dado su parcial procedimiento, que beneficia descaradamente a los laboratorios farmacéuticos (tema del que escribiré en esta bitácora en próximos días).
 
«Queremos que se contemplen nuestras denuncias de corrupción en el proceso de aprobación de venta de los fármacos así como la falta de transparencia de la Comisión Europea», argumenta Juan Pundik, psicoanalista madrileño presidente de Filium, Asociación para la Prevención del Maltrato al Niño y uno de los promotores de la Plataforma.
 
La Comisión de Peticiones ha solicitado información adicional a la Comisión Europea. Por ello, la Plataforma Contra la Medicalización de la Infancia está llamando a la participación de todos los profesionales de la salud que quieran sumarse al proyecto reivindicativo: «Sería útil que ampliáramos nuestras denuncias sobre los efectos adversos de los ISRS (medicamentos inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, antidepresivos como Prozac) en niños. Para más información pueden solicitarnos la documentación respectiva», concluye Pundik.
 
En marzo de 2005, dos especialistas en este campo, los doctores Edward W. Boyer y Michael Shannon, del Centro Infantil de Boston, advirtieron que más del 85% de los médicos ignoraban el riesgo del síndrome de exceso de serotonina.
 
El exceso de serotonina en el cerebro provoca muchas muertes cada año
 
En un artículo publicado en New England Juornal of Medicine, Boyer y Shannon dieron a conocer un informe obtenido en 2002 a base de llamadas a centros de control de toxicidad en todo Estados Unidos. Este trabajo científico concluyó que en ese año se habían producido 7.349 casos de toxicidad por exceso de serotonina. 93 de ellos fueron mortales. En 2005, último año del que se tienen estadísticas disponibles, se reportaron 118 muertes.
 
La Plataforma cuenta ya con 2.500 adhesiones y los interesados en sumarse pueden hacerlo mandando sus datos al correo: jpundik@arrakis.es

Madre, desgarrada, pero con la memoria intacta

Los Testimonios de Isabel Ferragut llegan a casa por Navidad, como el turrón. Ferragut es una mujer, de 77 años de edad, que hace ya más de 18 años perdió a su único hijo, Arturo. El cerebro del joven fue «achicharrado» (así lo reconoció más tarde la fiscal del caso) en una clínica de Barcelona, la Dexeus. Ella hace dos semanas envió su testimonio, un informe que lleva por título A la memoria de mi hijo Arturo: Carta abierta a los políticos apelando a su conciencia, a numerosas personalidades políticas en busca de apoyo.
 
Arturo era un muchacho sano hasta que le radiaron el cerebro con rayos gamma, como lo prueban los infomes clínicos previos
 
José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno español; José Montilla, responsable de Ejecutivo catalán; los ministros españoles; altos jerarcas del PSOE, como José Bono; el Defensor del Pueblo de Cataluña; las consejeras de Justicia y de Sanidad catalanas; la presidenta del Tribunal de Justicia de Cataluña, y otros muchos políticos de nuestro país ya lo tienen en sus manos.
 
Como digo, han pasado más de 18 años pero esta mujer luchadora no ha conseguido todavía Justicia. Arturo intentaba solucionar un problema psicológico (una neurosis obsesiva) y se puso en manos de unos médicos que le radiaron la cabeza «de manera indiscriminada», argumenta la madre. Este tratamiento a la postre le provocaría la muerte.
 
La radioterapia no suele aplicarse a pacientes con trastornos mentales
 
«Le vendieron el ‘tratamiento del futuro’ pero una sola sesión de rayos gamma, una sola, terminó con su joven vida. Mi hijo ingresó en la clínica Dexeus con el cuerpo y el cerebro físicamente sanos y salió para regresar a casa condenado a muerte. Fue radiado durante dos horas y veinte minutos», explica Ferragut.
 
Madre e hijo, siempre según el testimonio de los mismos, no fueron advertidos de la peligrosidad de esta «terapia», discutida para los trastornos mentales. «Le dijeron que lo peor que le podía pasar es que se quedara como estaba y eso fue lo único que aceptamos», explica Ferragut.
 
Madre e hijo poco antes de la muerte de este. Foto extraída del libro Arturo: Una muerte en manos de los médicos Benjamín Guix Melcior y Enrique Rubio García, que escribió Isabel Ferragut
 
Durante todos estos años, Isabel Ferragut no ha parado de litigar en los tribunales sin que hasta ahora haya encontrado Justicia. Los pasos dados son interminables. Baste como muestra que desde que presentó su querella hasta que se inició el proceso transcurrieron siete años; nada más presentar su demanda el caso pasó por las manos de hasta tres jueces que archivaron la denuncia por «falta de pruebas», al tiempo que los médicos que le disgnosticaron al muchacho radionecrosis profunda tras la radiación, no podían salir de su asombro ante dicha resolución. Al final, el juez del caso negó la razón a la madre de Arturo.
 
Tras esta decisión la mujer ha recorrido todas las instancias judiciales posibles recurriendo la sentencia y buscando amparo jurídico. En algún caso ha llegado a tardar tres años en que le desestimen su apelación. Ni el Tribunal Europeo de los Derechos Humanos ni el de los Derechos Civiles de la ONU, le han dado la razón.
Portada de Diario 16 cuando se celebró el juicio, en la que se ve a los doctores Guix y Rubio
Entretanto, Isabel Ferragut pasa la navidad esperando a que los jueces decidan si le cierran la página web donde denuncia todo el caso o sólo deberá quitar parte de su contenido. Los médicos que aplicaron las radiaciones sobre la cabeza de su hijo la han denunciado por «injurias».

El precio de los medicamentos

Una de las estrategias que utilizan los lobbies industriales es la presión sobre científicos y académicos que realizan averiguaciones que no convienen a los intereses del sector. Esto ocurre, por ejemplo, con el lobby de la telefonía móvil y la contaminación electromagnética o el del sector químico, ciertos científicos españoles como Nicolás Olea, de la Universidad de Granada o Julio Gómez-Perretta y Manuel Portolés, del Hospital La Fe de Valencia, lo han sufrido en sus carnes. Como profesor de la Universidad Kennedy de Buenos Aires (Argentina), Eduardo M. Cocca enseñaba cinco asignaturas, entre ellas Ejercicio y Administración Farmacéutica. Como él mismo explica: «tenía más de 50 excelentes alumnos, inquisitivos, ávidos de adquirir conocimientos. Mi misión, además de enseñar Legislación Farmacéutica, era explicarles cómo es esta actividad comercialmente».
 
Tal es así, que como trabajo práctico averiguaron al azar el costo de un preparado que se utiliza como descongestivo nasal en gotas, droga a base de nafazolina que lleva más de 40 años en el mercado. Consultado el proveedor más importante para la industria farmacéutica, contestó que el costo por frasco era de 0,03 centavos y que se vende por 11,25 pesos. «Esto significa un beneficio por unidad del 37.500%, algo que no tiene parangón con ninguna actividad lícita», indica el maestro.
 
El 5 de junio de 2007, el profesor Cocca fue invitado a una conferencia en la Cámara de Diputados de la Nación, donde se realizaron unas Jornadas sobre “Ética y Medicamentos». Al evento, asistieron legisladores, funcionarios de los gremios profesionales, representantes de las patronales farmacéuticas, farmacéuticos y otros profesionales sanitarios. Finalizada la jornada podían exponerse posiciones de cada uno que quisiera hablar: «Yo fui uno de ellos -narra el catedrático- y en particular me dirigí a las Cámaras de la Industria, a los que tenía a pocos metros. El drama, expliqué, es la accesibilidad de nuestro pueblo a los fármacos, se nos mueren compatriotas, en particular niños, muchos de ellos muy pequeños y esta gente sin ninguna culpa gana el 37.500%. Esto es un escándalo de proporciones y el Estado debe y puede solucionarlo, no puede hacerse el distraído».

Altos funcionarios censuran para proteger los intereses de determinados laboratorios farmacéuticos

La respuesta a las palabras de Cocca no se hizo esperar, no para intentar solucionar el tema sino para quitárselo de enmedio. «Me citó mi Decano, el doctor Capón Filas y la directora de Farmacia, farmacéutica Magariños, y con un discurso Kafkiano e hiriente, me quitaron la cátedra de Farmacia. Días después todas las demás. No estoy arrepentido, no puedo ser cómplice de tamaño despropósito», concluye este profesional, que no ha tenido inconveniente en publicar su último sueldo: 231 pesos, aguinaldo incluido.

 
Esto demuestra una vez más que en cualquier país puede existir democracia de hecho al mismo tiempo que la censura sobre quienes cuestionan el orden establecido intenta borrar del mapa las voces honestas que denuncian las injusticias.

Chapapote para los extremeños

El pasado viernes, sábado y domingo, tuve el primer y feliz encuentro en tierras extremeñas con ciudadanos y ciudadanas preocupados por la instalación, en la fértil comarca de Tierra de Barros, de una refinería petroquímica. Desplazarme hasta allí para presentar mis libros ha sido el motivo por el que no he atendido este blog durante ese tiempo (http://www.regiondigital.com/modulos/mod_periodico/pub/mostrar_noticia.php?id=68909). Pero ha merecido la pena. Y tanto.
 
Los balcones de Villafranca de los Barros expresan su rechazo a la construcción de una refinería e industrias afines en la comarca
 
Quienes me conocen saben que me cuesta hacer «la pelota», mi timidez tiene buena parte de culpa en ello. Pero lo cierto es que extremeños y extremeñas me han dispensado una acogida muy, muy cálida y han mostrado por los dos libros un interés extraordinario.
 
Al tener buena parte de mi familia en tierras pacenses intuía que las cosas funcionarían bien por allí pero mis anfitriones eso lo desconocían. Que el libro Conspiraciones tóxicas tenga un capítulo llamado Chapapote extremeño, que trate también los asuntos turbios que rodean a la central atómica de Almaraz o que destaque los nuevos movimientos sociales de contestación al poder en la región, era un aliciente claro para los habitantes de esta comarca extremeña. Mi otro trabajo en formato libro, Traficantes de salud, ha vendido más ejemplares que en cualquier otro punto del Estado de los muchos a los que acudo con frecuencia desde el pasado mes de febrero en que lo presenté.
 

El público de Mérida demostró un alto conocimiento y compromiso con los temas de salud y ecología (Foto: PCRN)
 
El interés por lo que está sucediendo en su tierra, y en la Tierra, por lo que se refiere a los temas de salud y ecología que está mostrando la población extremeña supera a la media española. Y los asuntos por los que preguntaron en las dos presentaciones que hice, Mérida y Villafranca de los Barros, me hablan de una tierra en estado de agitación. Una tierra que se niega a ser colonizada culturalmente por el desarrollismo y a que otros decidan qué es lo que les conviene.
 
La población extremeña, sobre todo la más afectada, la que vive en Tierra de Barros, conoce en profundidad la trama de poder que rodea al desarrollo de la planta de refino que impulsan el empresario nº1 de Extremadura, Alfonso Gallardo, y los números 1 de su Gobierno regional, con Juan Carlos Rodríguez Ibarra a la ex cabeza y con Guillermo Fernández Vara ahora en la presidencia.
Tanto en Mérida como en VIllafranca desgranamos las relaciones de parentesco y sentimentales del círculo de Gallardo y los altos jerarcas del partido, el PSOE, que es quien gobierna en Extremadura desde hace 25 años.  

El empresario más poderoso de Extremadura y el Gobierno del PSOE impulsan en dicha región una refinería petroquímica

Pero además de este, que como es lógico es el problema que se cierne sobre sus cabezas (y pulmones y vides y olivos, etc) que más preocupa a estos vecinos, se interesaron mucho por las prácticas de la industria farmacéutica que ilustra Traficantes de salud. Y también por el funcionamiento actual de los medios de comunicación. Esto me sorprendió, de nuevo, gratamente.

En general, la crisis de identidad y credibilidad que vive hoy el periodismo es algo que despierta la curiosidad de muchos ciudadanos en toda España pero en Extremadura -por las especiales, por difíciles- condiciones en las que trabajan periodistas y medios que desean ser independientes, es un debate que está de manera cotidiana en la calle. Y es que la existencia de medios amordazados, como ocurre en la tierra extrema y dura, son un signo de falta de democracia, de totalitarismo (con urnas, si se quiere).

 

Villafranca de los Barros es un pueblo decidido a luchar por un futuro que no sea químico tóxico (Foto: PCRN)

Preocupa mucho a las personas que se oponen a la construcción de la planta petroquímica, agrupadas, sobre todo, en torno a la Plataforma Ciudadana Refinería No (PCRN), el destrozo cultural que puede producir esta instalación en una tierra que vive mayormente de la actividad agropecuaria y de su relación con el entorno. Se dejan notar en Extremadura también, una región que desde mi punto de vista tiene la suerte de haber llegado tarde a la industrialización (y por ello con voluntad política podría situarse a la cabeza de Europa en cuanto a un modelo de desarrollo ecológico) el impacto social de la sociedad de consumo.

La alienación que esta provoca presiona muy fuerte sobre la cultura extremeña, que va adaptándose a los mercados globales regalando su bagaje histórico, conquistado con el esfuerzo de sus trabajadores. Qué duda cabe que lo que Alfonso Gallardo S.A. y el Gobierno regional tratan de impulsar va en esta línea y responde, como el propio modelo de globalización capitalista, a intereses privados que no tienen ningún escrúpulo es pasar por encima del interés público.

Compartir estos dos días con tantos extremeños comprometidos con su/nuestra tierra ha sido muy emocionante y espero que la próxima vez que los visite me regalen muchas más buenas noticias.

Abogados que hacen lobby

El lobby farmacéutico, contábamos ayer, trata de cambiar las leyes que en este momento prohíben hacer publicidad convencional de los medicamentos. Para ello cuentan con la inestimable ayuda, entre muchas otras, de la Asociación Española de Derecho Sanitario, que ha organizado foros para discutir lo que denominan «derecho a la información», de los pacientes, claro. Esta es una manera sutil de hablar de publicidad directa al posible consumidor de fármacos que, por cierto, viene importada de Estados Unidos.
 
Edificio del Capitolio, sede del Senado de EE.UU., donde en el siglo XIX nació el fenómeno lobby
 
Plataformas como la citada organizan con regularidad foros para discutir sobre este derecho que, entienden, es el derecho de los laboratorios a utilizar cualquier medio -hacer publicidad de remedios farmacológicos como si de inocentes chupa chups se tratara- para conseguir el fin de la mayor cantidad de beneficio posible; salud pública mediante.
 
Por ejemplo, en 2006, esta asociación celebró su XIII Congreso Nacional de Derecho Sanitario en el Colegio Oficial de Médicos de Madrid (http://www.aeds.org/frames/frame2.htm). Dicha actividad fue patrocinada, al menos en parte, por laboratorios como AstraZeneca o Merck, Sharp and Dohme (MSD). En concreto, Merck tenía un Taller de Trabajo MSD bajo el títutlo: La información al paciente, ¿un derecho pleno?
 
Uno de los ponentes de dicho evento fue Xavier Badía, ejecutivo de la multinacional de marketing farmacéutico IMS Health. Badía desarrolló el trabajo Perspectiva socioeconómica de la información al paciente. La firma estadounidense International Marketing Services Health (IMS) vende a las compañías farmacéuticas, a precios elevadísimos, informaciones sobre qué recetan los médicos y con qué asiduidad. Esta información privilegiada es muy importante para el departamento comercial de cualquier laboratorio. Éstos pueden así dirigir a sus visitadores médicos directamente a los galenos que son más fáciles de seducir para que receten sus productos (generalmente mediante regalos y otros estipendios; en ocasiones se hace directamente con dinero a cambio de recetas). Informaciones como las que vende IMS Health sirven luego a los grandes laboratorios para rizar el rizo e intentar que los médicos receten ciertos medicamentos para dolencias para los que no están aprobados, con el consiguiente peligro que puede representar esta práctica para la salud de sus pacientes, precisamente.
 
Otro ponente de dicho Taller MSD fue Albert Jovell Fernández, presidente del Foro Español de Pacientes, que dictó la conferencia El nuevo modelo de paciente: La democratización de la información al paciente. Jovell fue entrevista recientemente por el diario español Público. La entrevistadora le recordó que su asociación está financiada en parte por los laboratorios. Él respondió: «Nuestra financiación es, sobre todo, pública. También nos apoya la Generalitat de Catalunya. El resto está muy repartido entre muchos laboratorios y fundaciones y nunca hemos influido en promover ningún tipo de intervención» (http://www.publico.es/ciencias/020478/deberia/centros/salud/abiertos/24/horas/dia)
En EE.UU. los anuncios publicitarios han creado grandes presiones a los médicos ya que los pacientes llegan a la consulta exigiéndolos, narra un profesional sanitario desde aquel país. El gasto en publicidad es enorme lo cual encarece el precio de los medicamentos. «Ya no es sólo la industria farmacéutica la que presiona sino también el sector publicitario que es fortísimo. Las cadenas de televisión también se benefician de la publicidad».
 
En suma, existen muchos intereses en juego para conseguir publicitar los fármacos de receta al ciudadano y este tiene todas las de perder si estos lobbies lo consiguen.
 

Existen lobbies de abogados que presionan para que pueda hacerse publicidad de los fármacos que necesitan receta